Chocolate con facturas y payasos para dar nuevas oportunidades

En el barrio San Cayetano está el merendero Reyes. Ese espacio al que Ana Reales, mamá de Miguel Reyes Pérez, le pone tiempo y esfuerzo como una manera más de hacer justicia por su hijo, víctima de gatillo fácil. “Que a estos chiquitos no les falte, aunque sea, una merienda caliente y un pedazo de pan -dice Ana cuando se le pregunta por qué pensó en armar un lugar así en el barrio-. Para que ellos tengan una oportunidad más que la que tuvo mi hijo y no les pase lo mismo”. Desde fines del año pasado, el merendero recibe a niños y niñas del barrio, y les brinda esa tacita de mate cocido que algunos toman en el lugar compartiendo risas y juegos, y que otros se llevan a sus casas para estar con sus familias.

El domingo pasado, día de la niñez, el lugar se llenó de colores, golosinas y regalos. La merienda fue esta vez un chocolate acompañado con facturas y animado por payasos. La solidaridad de la gente que acompaña a Reales hizo posible una jornada de juegos y alegría. “Los chicos tienen derecho a festejar su día y recibir un regalo por más chiquito y sencillo que sea”, dice la mujer al terminar el día, orgullosa de hacerle frente a la crisis manteniendo la alegría. 

Fotografías de Alejandro Sarmiento

Clic para agrandar